Bajar el carro de la cabeza

Siete años atrás una reconocida marca europea de carros publicó en medios impresos de Venezuela un anuncio que promocionaba uno de sus vehículos. Mostraba unos zapatos deshauciados, colgados de un aro de baloncesto. Tenían inscrita la palabra clemencia en lo que quedaba de sus suelas, y estaban acompañados de este cínico mensaje: la ciudad no está hecha para caminarla.Acto seguido nos conminaba a montarnos en uno de sus confortables vehículos. Una ingeniosa manera de sacarle provecho a la percepción de una realidad, que por esos años ya exhibía una tasa de movilidad peatonal 19%, distando apenas 5 puntos de los desplazamientos en vehículos particulares 24%.Algunas cosas han cambiado desde entonces. El Ministerio del Transporte Terrestre dice que 2 millones de vehículos trajinan las vías de la Región Metropolitana de Caracas y apenas transportan a 20% de la población, y que si estacionáramos esos vehículos, uno detrás de otro, necesitaríamos un poco más del doble de las vías existentes. La consecuencia inevitable de esto es una congestión ya ordinaria, que cada vez con más frecuencia se convierte en megacongestión.Esta realidad, más el trabajo de muchos colectivos que defienden una movilidad sustentable, está cambiando aquella idea automática de que movilidad equivale a vialidad.Quizá por eso en estos días escuchábamos sorprendidos una cuña radial de una marca de embutidos, donde el locutor dejaba colar, hablando de cosas saludables, que un día podíamos movernos en bicicleta en vez de en el carro.Hagamos el esfuerzo de ima ginar que un día salimos a las calles de Caracas y no hay carros ni motos. Sólo gente que se mueve a pie, en bicicletas, en patines, patinetas y en transporte público. Abstracción difícil, pues el carro forma parte de nuestras vidas, inclusive para los que no poseen uno. Es difícil, pero no imposible de lograr. Para ello debemos desmontar los mitos que aún siguen alentando el uso excesivo del vehículo particular, a la vez que incitar a reconocer que formamos parte de ese exceso, que cada uno de nosotros constituye un pedacito del problema que llamamos congestión.1 Es más seguro. Anual mente mueren 8.000 venezolanos en accidentes viales de los cuales 25% son peatones, según el sociólogo y urbanista Omar Hernández, sin contar que, armas...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR