Conflictos de convivencia fomentan violencia en torres de la Misión Vivienda

Casi sin que los caraqueños se dieran cuenta fueron edificadas las torres de la Misión Vivienda en varios sectores de la capital. Con ellas llegaron sus habitantes provenientes de refugios o zonas populares, y los conflictos propios de la improvisación en la asignación de esos inmuebles no se hicieron esperar. Homicidios, tiroteos, con sumo de alcohol y drogas son sólo algunos de los problemas que han sucedido en estos nuevos conjuntos residenciales. Para quienes han estudiado el problema de la violencia en Venezuela, las situaciones de conflictividad en torno a estas viviendas eran previsibles, pues existen dos factores que inducirían el comienzo de los problemas. En principio se sabía que había recelo de las personas de las comunidades adyacentes por la llegada de extraños a las urbanizaciones y, por otro lado, hay inconvenientes de convivencia entre los mismos inquilinos de los edificios construidos por el Gobierno. Los de convivencia vienen dados con la adaptación de vivir en un edificio porque no es lo mismo vivir en este tipo de construcción que en una casa; en una torre destacan el ruido, el manejo de la basura, hay espacios comunes y, en general, estas personas no saben vivir de esta manera. Por otro lado, están los edificios adyacentes que tienen hábitos distintos, maneras diferentes de cohabitar en comunidad y por ahí comienza la violencia, explicó Roberto Briceño León, sociólogo y director del Observatorio Venezolano de Violencia. Algunas víctimas. Uno de los casos más sonados ocurrido dentro de una de las construcciones del Gobierno es el asesinato del médico forense Edixon Ipuana, de 34 años de edad, en octubre de 2012. Al profesional, que trabajaba en la morgue de Bello Monte, lo mataron por reclamarle a un grupo de vecinos que supuestamente estaban consumiendo drogas en la entrada de la urbanización. Ipuana llegaba a su apartamento en el edificio 37 de la segunda etapa de Cacique Tiuna, en La Rinconada, cuando fue atacado. Pero el caso de Ipuana no es el único. El 29 de diciembre pasado, en una de las torres construidas dentro de Fuerte Tiuna un vecino mató a otro porque lo tropezó con una nevera cuando la subía a su apartamento nuevo. Nosotros nos mudamos el 21 de diciembre y el 29 fue el primer problema. El señor Manuel iba subiendo al piso 11 con una nevera y, sin querer, tropezó a un hombre que le dicen Humo, y después él subió con una pistola y lo mató. La esposa de Humo, que era a la que le habían adjudicado el...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR