¿Democracia vs autoritarismo?

¿Versus militarismo, versus comunismo? En este momento me vienen a la memoria unas imágenes televisivas provenientes de La Habana, en las cuales nuestro comandantepresidente-líder indiscutible del proceso escuchaba impasible las cosas que le decía su padre putativo palabras más, palabras menos: Hugo, tú sabes muy bien que nosotros no creemos en la democracia.... De igual forma, memorizo la entrevista que Vanessa Davies le hiciese a Fidel en otra oportunidad, en la cual la periodista interrogaba al comandante sobre qué entendía él por socialismo del siglo XXI. Fidel, con su tono extremadamente bajo y muy anciana voz, le respondió: El socialismo... es... comunismo.... Mientras tanto, en este mun do interconectado, hemos visto cómo un enojado Raúl, su hermano, barría el suelo con la dirigencia del Partido Comunista, catorce años después, presente en el Sexto Congreso, al advertir hasta con desprecio el fracaso de más de cincuenta años de revolución; y entre otras perlas, anunció no más dogmas, la eliminación de las consignas vacías, del amiguismo favorecedor, de la mentalidad de inercia y el ensayo de tímidas medidas económicas. Nuestra capacidad de asom bro no termina aquí; se sienten vientos de protesta en las tierras tribales árabes y todo el norte de África bautizado como Revolución de los Jazmines, un proceso de sublevación de las masas sometidas por largos años en Egipto, Yemen, Bahréin, Libia y Siria, que se lamentan sin empleo, sin futuro cierto, sin miedo, demandan reformas, cambios y mayor libertad... Pero la condición humana es impredecible, también en Europa hemos visto cómo la revolución posmoderna de los indignados cuestionaba el sistema bipartidista imperante en el reino de España posterior a Franco, y con efectos contaminantes hacia Francia y quizás al resto de Europa. Como si esto no fuese sufi ciente, se observa un reacomodo de la derecha en toda Europa, ante la otra crisis en pleno desarrollo, la del capita lismo, a pesar del crecimiento salvaje de China. Al respecto, Pierre Ansart en su obra Los clínicos de las pasiones políticas ya había llamado la atención sobre el aspecto pasional de las relaciones...

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