2012, del optimismo a la concreción

Todos los años son diferentes, es cierto. El próximo, sin embargo, se anuncia como un año muy especial: 366 días en los que se producirán importantes cambios en la manera de enfocar el país. Año de encrucijada y de definiciones, en el transcurso de 2012 se trazará la orientación de Venezuela: la continuidad de este presente marcado por la destrucción y la desesperanza o el inicio de un futuro de optimismo, trabajo, grandes retos y orgullo nacional. La opinión pública, tanto la que registran las encuestas como la que se percibe en la calle, muestra al menos dos cosas: el desmoronamiento lento pero persistente del mito de la imbatilidad y la consolidación de nuevos liderazgos robustecidos por una clara voluntad de unidad. Para quienes la actual orientación de Venezuela sólo conduce a un recrudecimiento de la destrucción, 2012 se presenta como un año en el que las cosas pueden cambiar. Es posible ganar y se ha venido trabajando para ganar. Los candidatos con más opción en las primarias representan una Venezuela renovada en lo po lítico, con nuevas propuestas, con apoyo ciudadano, con visión de su compromiso con el país. Si en 2006 la fuerza propa gandística del Gobierno logró identificar al candidato de la oposición democrática como expresión del regreso al pasado, en este 2012 el pasado Âtodavía presente es claramente Chávez, en tanto que los nuevos líderes son la expresión del futuro, de la posibilidad de cambio para bien. La renovación del modo de hacer política y de construir el país no pasa por el autoritarismo populista ni por la opción indefinida y fracasada del socialismo del siglo XXI; pasa, al contrario, por alternativas democráticas capaces de unir, de entusiasmar, de generar trabajo y bienestar. El optimismo frente a los precandidatos que encarnan las posibilidades de futuro nace, entre otras razones, de la coincidencia en una orientación basada en la valoración de la persona y de sus potencialidades. Sus propuestas reflejan fe en el ser humano y en su capacidad de superación, confianza en él como actor económico y político, respeto a su integridad y a sus derechos. Así se...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR